martes, 23 de noviembre de 2010

Cómo conocer el mundo con Michael Palin... y una sonrisa


Una vez que a uno le entra el gusanillo de viajar, no se puede dejar de pensar en dónde se irá o qué se visitará. Se pueden comprar muchas guías, leer en Internet, pero tengo que reconocer que hay una fuente que me resulta muy agradable de consultar: los documentales de viajes de Michael Palin.

¿Quién es este señor, os preguntaréis? Se trata de un famoso cómico, actor, escritor y presentador televisivo que se dio a conocer mundialmente como miembro del grupo humorístico británico Monty Python, y más adelante como guía de documentales de viajes en TV. Cuenta con el honor de ser Caballero del Imperio británico

A pesar de que ha seguido su carrera de actor en solitario con relativo éxito (fue premiado por su papel secundario en Un pez llamado Wanda), Palin ha cosechado un notorio éxito como escritor de viajes y presentador de documentales en la BBC sobre este tema. En ellos deja traslucir su peculiar sentido del humor ("of course, british!"), así como su simpatía, curiosidad y respeto por las gentes con las que se encuentra. Se mezcla con los lugareños allá donde va (recomiendo verle recoger la basura en Venecia con los trabajadores municipales), lo que le permite alejarse del documental de viajes "canónico". Con todo, tiene concesiones a la galería y de vez en cuando se permite sus lujillos ("Humanum est", you know!)



Sus viajes para la BBC le han llevado por todo el mundo (incluso en uno de ellos lo rodea siguiendo a Julio Verne), del Polo Norte al Sur, el desierto del Sáhara, el Himalaya y Europa del Este, entre otros. En España se han transmitido, entre otros, por el Canal 33 catalán.

Si queréis más información (aunque está en inglés), podéis consultar su web de viajes, algún interesante post al respecto de su trabajo en webs de viajes o los múltiples extractos de sus vídeos que circulan por Internet. No os arrepentiréis.

martes, 16 de noviembre de 2010

Microrrelato para 18/11/2010

A mí me empiezan a entrar dudas de que exista alguien más.

Gracias a mi reloj, sé que hace dos días recuperé la consciencia, y desde entonces vivo con la amargura de saber que Nora ya no está a mi lado. Salió alarmada a la calle con el pequeño Zack tras confirmarse las apocalípticas amenazas de aquel dirigente escudado en un dios que vengaba las injusticias cometidas con su pueblo.

Las calles están desiertas y ningún teléfono da línea. Lo último que recuerdo fue un intenso fulgor.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Otro microrrelato

El juego de Ole
Rutinariamente intercambio sus pulseras identificativas, porque sé que le descoloco.

Al abrir el maletín y exponerme cada mes las referencias de su muestrario, el metódico y ordenado Olegario Maluenda ve sometida su paciencia hasta los límites del estoicismo. Con una indumentaria que vivió mejores tiempos, mueve su escasa y oronda anatomía resoplando con frecuencia. Los vahídos se escapan por debajo de su bigote cano, al tiempo que entorna los ojos y se seca el sudor nervioso.

Entre sus compañeros de profesión se habla de sus ventas. Al cogerme de la mano por primera vez, comprendí el secreto de su éxito.